Hace no mucho tiempo, los audífonos eran percibidos como una solución médica, silenciosa y muchas veces invisibilizada. Hoy, en cambio, se están convirtiendo en dispositivos inteligentes, conectados y profundamente personales, que acompañan las rutinas, estilos de vida y emociones de las personas que viven con algún tipo de disminución auditiva.
Bajo este nuevo escenario, el mercado ha detectado necesidades y tendencias crecientes: los usuarios exigen tecnología intuitiva, autonomía en la gestión de sus dispositivos y un diseño que se integre naturalmente en su vida cotidiana. Por otra parte, se ha derribado el mito de que sólo adultos mayores requieren corregir pérdidas auditivas; hoy cada vez más personas jóvenes buscan estas soluciones.
“Las nuevas demandas de los usuarios nos han llevado a ofrecer audífonos a la medida y no estandarizados. Ya no se trata solo de ‘corregir’ algo, sino de vivir plenamente, y esa actitud cambia toda la relación con el dispositivo que se usa”, comenta Luciano García, especialista del área médica de GAES Chile, empresa experta en soluciones auditivas.
En ese sentido, desde GAES Chile han detectado cuatro necesidades clave de los nuevos consumidores, las cuales han alineado además con nuevas ofertas de audífonos Amplifon:
Las exigencias tecnológicas a la hora de escuchar
“El mercado ya no responde a un perfil único. Hay una diversidad enorme de expectativas, y por eso apostamos por un portafolio que habla en lenguaje cotidiano. La persona no elige ‘un audífono’, elige una experiencia”, asegura Luciano García.
Ahora a través de aplicaciones y diversas plataformas, las personas pueden no solo ajustar el volumen o encontrar su audífono si lo pierden, sino también contactar a su especialista, agendar visitas, recibir consejos personalizados y –en etapas futuras– incluso resolver problemas a distancia. Todo desde su smartphone.
Esta transformación refleja una tendencia global: los dispositivos de asistencia están evolucionando hacia tecnologías empáticas, que entienden al usuario y se adaptan en tiempo real. “La tecnología ya no es solo hardware, también es experiencia. Y eso implica acompañar, escuchar, co-crear con el usuario. No es solo una solución técnica, es una relación de confianza”, señala el ejecutivo de GAES.