Carlos Caszely no necesita rodeos. En un nuevo capítulo de Máximas, de TNT SPORTS, el histórico goleador chileno compartió su visión descarnada sobre el presente de la Selección Chilena, criticó el discurso instalado en torno a los técnicos extranjeros, defendió la calidad de los entrenadores nacionales y se la jugó por un nombre que no deja indiferente: Marco Antonio “Fantasma” Figueroa.
“El barco está hundido, ya estamos fuera del Mundial”, lanzó sin titubeos. “Estos dos partidos los va a tomar Córdova y si le va bien, lo podrían dejar. Ya basta del verso de los argentinos. En Chile hay buenos técnicos y hay materia prima. Hay jugadores para la pelota, pero les falta jugar al fútbol”, reflexionó. Caszely no solo respaldó a Nicolás Córdova por su experiencia en juveniles, sino que postuló abiertamente a Figueroa: “Yo creo que hay uno que odia todo el mundo, pero lo haría bien por su personalidad, que es el Fantasma Figueroa. Lo odian porque es directo, y en este país eso es complicado. Pero el tipo pondría las reglas claras, le encantan las cosas claras, y podría ser una buena alternativa”.
Colo-Colo y su mayor pérdida personal
El ídolo de Colo-Colo también abordó el futuro del club albo y la necesidad de recuperar la identidad desde la banca. “A mí me gustaría un chileno, pero lo más probable es que venga un extranjero. Yo no soy el presidente de Colo-Colo, pero si tengo que elegir, me gustaría que fuera chileno y colocolino. Hay varios: Vera, Ramírez, Basay. Ya saben lo que es vestir la camiseta de Colo-Colo y la presión que tiene el cargo”, afirmó.
Lejos de encerrarse en la nostalgia, Caszely también compartió momentos íntimos de su vida personal, marcados por el amor y por el dolor. Habló con emoción sobre su relación con María de los Ángeles, su compañera de vida por 50 años. “La vida con ella fue extraordinaria. Nunca jamás nos acostamos sin hablar. Fue reina cuando estuvimos con presidentes, jeques y primeros ministros, pero también cuando íbamos a ollas comunes. Ella era la misma en una población o con un jeque. No nos quedó nada pendiente por hacer. Yo no hubiese sido lo que fui si no era por ella. Cada cierto tiempo se me cae una lágrima. Me encantaría poder contactarme alguna vez con ella, pero soy doble ateo y no creo que pase”.
El legado de Leonel y los clásicos con códigos
Caszely también recordó con cariño su relación con Leonel Sánchez y los superclásicos que marcaron una época: “Nos jugábamos la vida durante 90 minutos, pero después nos juntábamos con Socías o con Hoffens a tomar un café. El viejo Leonel era un grande. En las pichangas del barrio yo era Leonel, y todos nos poníamos nombres de la selección. Mi relación con él fue maravillosa y siempre le tuve mucho respeto”.
Finalmente, con la mezcla de orgullo y gratitud que lo caracteriza, cerró con una frase que lo define: “Donde voy hay respeto y cariño. Soy muy agradecido. Fui un hombre inmensamente feliz desde que nací hasta el 22 de febrero de 2022. Yo soy profeta en mi tierra, y eso es algo muy bonito”.