El exdefensor de Colo-Colo, campeón con Ñublense y actual formador en Everton, revivió en Máximas uno de los episodios más determinantes de su vida: el secuestro y tortura de su padre durante la dictadura argentina. También recordó su suspensión de ocho fechas en 2014 y reflexionó sobre los límites de la libertad de expresión en el fútbol chileno.